Los episodios de gastroenteritis en niños son muy frecuentes, sobre todo, en los niños más pequeños y, junto a las infecciones respiratorias representan los principales motivos de consultas en urgencias, siendo su mayor incidencia entre octubre a mayo. Según la Asociación Española de Pediatría, la gastroenteritis aguda (GEA) se define como una inflamación de la mucosa gástrica e intestinal, habitualmente de causa infecciosa.

Lo más frecuente es que la gastroenteritis esté causada por virus, aunque también algunas bacterias (como la Salmonella) y algunos parásitos son causantes de gastroenteritis aguda. Dentro de los virus, el rotavirus es el que produce los casos más graves sobre todo en los lactantes. Para ello disponemos de una vacuna no financiada, pero si recomendada en todos los lactantes, que se administra a partir del 2º mes de vida.

Gastroenteritis en niños

La principal vía de contagio es la fecal-oral, es decir, a través de las manos y objetos contaminados por un niño que esté con dicho proceso infeccioso llegará a otro niño, el cual si se lleva las manos o dichoobjeto a la boca se producirá el contagio. Por eso es importante lavarse bien las manos e insistir en seguir unas pautas correctas de higiene, tanto en casa como en el colegio y en cualquier entorno. Se trata de la principal medida de prevención que podemos tomar para evitar el contagio de estos microorganismos.

Gastroenteritis en niñosEntre los síntomas frecuentes en las gastroenteritis en niños tenemos: diarrea, es decir, un aumento de la frecuencia en las deposiciones con una consistencia más blanda o liquida de normal, vómitos, fiebre y/o dolor abdominal de tipo cólico acompañado de inapetencia.

 

 

A veces encontraremos todos los síntomas presentes y en ocasiones solo algunos de ellos. En general, la gastroenteritis aguda se suele resolver en un periodo de entre tres y cinco días, pero pueden prolongarse hasta las 2 semanas. Pasado este tiempo se deberán buscar otras posibles causas, distintas a las más habituales para la gastroenteritis.

Complicaciones de la gastroenteritis.

La complicación más frecuente de la gastroenteritis grave es la deshidratación, que se produce por la pérdida de una gran cantidad de líquidos a través de los vómitos y las heces. Los niños con deshidratación leve tienen sed, pero los gravemente deshidratados están apáticos, irritables o adormilados (aletargados).

Los lactantes son mucho más propensos que los niños mayores a deshidratarse y desarrollar complicaciones graves. Los lactantes que están deshidratados precisan atención médica inmediata.

Las señales de peligro de deshidratación en los lactantes que requieren atención médica inmediata son las siguientes:Gastroenteritis en niños

  • Si la zona blanda de la parte superior de la cabeza (fontanela) está hundida.
  •  Si tienen los ojos hundidos.
  •  Si llora sin lágrimas.
  • Si la boca está seca.
  • Si moja el pañal de orina mucho menos de lo habitual.
  • Si se encuentran muy decaídos o adormilados durante todo el día.

 

¿Qué hacer ante una gastroenteritis?

REHIDRATACIÓN

Ante un episodio de gastroenteritis con vómitos y diarrea en niños, es recomendable ofrecerle líquidos con frecuencia. Pero sin forzar a que beba demasiada cantidad de una sola vez. Por ese motivo, se debe tomar en pequeños sorbos, pero repetidas veces a lo largo del día. Lo ideal es optar por una solución oral de rehidratación, las cuales además contienen los minerales que se pierden durante este proceso. Los lactantes deben continuar con la lactancia materna o con la lactancia artificial además de administrarles una solución electrolítica oral

Gastroenteritis en niñosNo deben administrarse a los lactantes y niños pequeños zumos, refrescos, bebidas carbonatadas, tés, bebidas deportivas y bebidas que contengan cafeína. Estas bebidas pueden contener demasiado azúcar, que puede empeorar la diarrea, y contener muy pocas sales (electrólitos), que son necesarias para reponer las que ha perdido el cuerpo. El agua corriente no es ideal para tratar la deshidratación en niños de cualquier edad, ya que no contiene sales.

 

Si el niño esta con vómitos, se recomienda mantenerse 30 minutos sin ingerir nada desde el ultimo vómito y posteriormente, comenzar a tomar suero oral despacio: aproximadamente unos 5 ml cada 5 minutos durante 1 hora. Tras 45 minutos o una hora tolerando líquido sin
vomitar, puede iniciar la alimentación de forma progresiva. Si el niño esta con diarrea, se recomienda que tras cada deposición beba medio vaso o un vaso de suero oral para reponer el liquido y minerales perdidos en las heces, pudiendo continuar con su alimentación habitual, excluyendo grasas y azucares. Si sufre una diarrea importante, será recomendable reducir el consumo de productos lácteos con lactosa ya que la gastroenteritis grave disminuye la capacidad del niño para la absorción de la lactosa, resultando incluso en una intensificación de la diarrea.

FÁRMACOS

En general no son necesarios ni fármacos antidiarreicos ni antibióticos. Solo en casos seleccionados, tu pediatra te lo pautará. En cuanto a los vómitos, si no ceden, se puede administrar ciertos medicamentos que alivian el vómito (como ondansetrón) por vía oral o intravenosa, siempre pautado por tu pediatra.Gastroenteritis en niños

PROBIÓTICOS

Los probióticos son microorganismos como las bacterias que se encuentran de forma natural en el cuerpo humano y que estimulan el crecimiento de las llamadas "bacterias buenas". El consumo de probióticos, como el Lactobacillus (presente de forma habitual en el yogur o en ciertos complementos orales), puede reducir la duración de la diarrea si se empiezan a tomar poco después del inicio de la enfermedad.

ALIMENTACIÓN

Es normal que el niño este inapetente, no lo fuerces y ofrécele comida en pequeñas cantidades. La dieta astringente no es imprescindible, es suficiente una alimentación suave, apetecible para el niño, y a demanda. Siel niño está con lactancia materna debe continuar con ella,

aunque fraccionando las tomas (menos cuantiosas, pero más frecuentes). Los biberones de leche hay que hacerlos con el número de cacitos habitual, sin diluirlos más. Entre los alimentos más indicados encontramos:

  • Gastroenteritis en niños
  • Hidratos de carbono: arroz hervido, sémola o puré de arroz, patata hervida, picada o en puré, pasta blanca hervida (más bien pasada) con un poquito de aceite de oliva o pan blanco tostado.

 

 

  • Verduras: La zanahoria hervida, picada o en puré es aconsejable. En cuanto al resto de verduras no serían demasiado recomendables, al menos inicialmente. Si el niño acepta bien estos alimentos, también de forma gradual, se pueden ir introduciendo
    otros alimentos:

    • Huevo: pasado por agua, hervido o en tortilla.
    • Pescado: el blanco es de fácil digestión. Merluza, bacaladilla, lenguado, rape, gallo… Lo mejor es tomarlo cocido o a la plancha.
    • Carne: las de pollo, pavo, conejo o codorniz son las más indicadas. Lo ideal es prepararlas  cocidas o a la plancha, pero sin piel.
    • Frutas: la manzana es la mejor tolerada, asada al horno es siempre una buena opción. También El plátano maduro y el membrillo son frutas que se recomienda.
    • Yogur: lo mejor es tomarlo natural y sin añadir azúcar o miel. El queso fresco también le puede sentar bien.

Gastroenteritis en niños
¿Qué alimentos se deben evitar?

  • Leche y quesos. Son alimentos difíciles de digerir y, sobre todo los quesos con una proporción de grasa generalmente elevada.
  • Verduras y frutas crudas. Tampoco es recomendable incluir frutos secos.
  • Bollería, chucherías, caramelos… Una excesiva cantidad de azúcar y/o (algunos) edulcorantes puede producir efectos laxantes.
  • Bebidas gaseosas como los refrescos o el agua con gas.
  • Comidas grasas o fritas.

Y por último recordad…

Si a pesar de estas recomendaciones el niño vomita mucho, no tolera sólidos ni líquidos o sigue vomitando, aunque no tome nada, si las deposiciones son muy líquidas, abundantes y frecuentes de tal manera que el niño no es capaz de beber al mismo ritmo que pierde o si lo nota deshidratado (está adormilado, decaído, tiene mucha sed, llora sin lágrimas, orina poco o tiene los ojos hundidos…) debes consultar con tu pediatra.

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