¿Qué es el síndrome de muerte súbita del lactante?
El síndrome de muerte súbita del lactante es la muerte repentina e inexplicable de un bebé de menos de 1 año de edad y en la cual los estudios post-mortem (autopsia) no demuestran ninguna causa.
¿Es muy frecuente?
- El Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL) es la causa de muerte más frecuente entre las 2 semanas y 1 año de vida, siendo responsable del 30 % de todas las muertes en este grupo de edad.
- Afecta a 1-2 de cada 1.000 recién nacidos vivos.
- Su mayor incidencia se observa entre el 2º y 4º mes de vida.
- Aumenta durante los meses fríos y en los grupos socioeconómicos más desfavorecidos, en los prematuros, en hermanos de otras víctimas del Síndrome de muerte súbita y en hijos de madres fumadoras durante el embarazo y después de él.
- Casi todas las muertes por este Síndrome se producen cuando parece que el niño duerme.
¿Se sabe la causa?
- Como hemos comentado antes, la causa es desconocida, aunque muy probablemente resida en una anomalía de los mecanismos del sistema nervioso que controlan la función del corazón y la respiración.
- En algunos estudios se ha encontrado una relación entre el sueño en decúbito prono (tumbado boca abajo) y un aumento del riesgo de síndrome de muerte súbita. Por ello, como recordaremos más adelante, se recomienda acostar al lactante boca arriba.
- Otros factores de riesgo son una cuna blanda (colchón de lana), los colchones de agua, el ambiente con humo de tabaco y una calefacción ambiental excesiva.
¿Quiénes corren mayor riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante?
Los bebés corren un mayor riesgo de contraer el síndrome de muerte súbita del lactante si:
- Sus madres fumaron, bebieron o usaron drogas durante el embarazo
- Sus madres no recibieron un cuidado prenatal adecuado
- Nacieron de forma prematura o con poco peso
- Hay antecedentes familiares de síndrome de muerte súbita del lactante
- Sus madres tenían menos de 20 años cuando dieron a luz
- Estuvieron expuestos al humo del tabaco después del nacimiento
- Están expuestos a un calor excesivo
- Duermen en una superficie blanda: Estar acostado boca abajo sobre una manta mullida, un colchón blando o un colchón de agua puede bloquear las vías respiratorias de un bebé.
- Duermen con objetos blandos o mantas y almohadas sueltas
- Duermen en la cama junto con sus padres. Las camas para adultos no son seguras para los bebés. El bebé puede quedar atrapado y asfixiarse entre los listones de la cabecera, en el espacio entre el colchón y la estructura de la cama o en el espacio entre el colchón y la pared. Un bebé también puede asfixiarse si uno de los padres dormido se mueve por accidente y cubre la nariz y la boca del bebé.
- Duermen boca-abajo: Los bebés a los que los colocan en estas posiciones para dormir pueden tener más dificultad para respirar que aquellos bebés que los colocan boca arriba
¿Qué podemos hacer para prevenirlo?
En base a los estudios y factores de riesgo identificados, os damos algunas recomendaciones que pueden minimizar el riesgo de padecer síndrome de muerte súbita.
- Evitar la posición boca abajo durante el sueño hasta los 12 meses de edad, ya que como hemos comentado, es un factor de riesgo ya que podría provocar un bloqueo de las vías respiratorias. La posición más adecuada es boca arriba. El decúbito lateral (de lado) es inestable y si lo colocamos así acaban boca abajo. Sólo por una indicación médica específica puede recomendarse colocar al bebé boca abajo.
- Cuando el bebé tenga la edad suficiente para cambiar de postura por sí solo, alrededor de los 5-6 meses, se continuará acostándolo boca arriba, sin preocuparse si más tarde se da la vuelta. No es necesario volverlo a colocar boca arriba a lo largo de la noche. Una vez el bebé aprenda a darse la vuelta, pasando de estar boca arriba a boca abajo y viceversa, puede permanecer en la postura de sueño que él elija.
- Mantener un estilo de vida saludable. Es decir, no fumar ni beber durante el embarazo ni después, así como evitar cualquier exposición al humo de tabaco, ha de procurarse que nadie fume alrededor del bebé, con especial hincapié en los padres, los cuales si fuman es recomendable realizarlo fuera de la casa y cambiarse de ropa para evitar el humo impregnado.
- Evita los colchones muy blandos o de lana, los almohadones y cojines, los colgantes al cuello y cualquier otro objeto o juguete que pueda provocar asfixia durante el sueño, como cintas o cordones en las inmediaciones de la cuna. Lo ideal es que el colchón sea firme y evitar objetos sueltos por la cuna ya que pueden interferir en la respiración si la cara de tu bebé se presiona contra ellos.
- Mantener en la habitación una temperatura de 20-22 °C y evitar el arropamiento excesivo, especialmente si tiene fiebre. Para evitar que el bebé se acalore demasiado, vístalo según la temperatura de la habitación, sin abrigarlo más de lo necesario. No cubras la cabeza del bebé mientras duerme. Fíjate en los signos del sobrecalentamiento, como el sudor o estar muy caliente al tacto.
- Lactancia materna siempre que sea posible. Ésta se ha asociado con un riesgo menor de Síndrome de muerte súbita del lactante.
- El uso del chupete puede ser un factor preventivo en el síndrome de muerte súbita del lactante. Por tanto, puedes ofrecerle un chupete a tu bebé a la hora de dormir, pero no lo fuerces si no lo quiere. Si suelta el chupete mientras está dormido, no se lo vuelvas a poner. Ten en cuenta, si amamantas a tu bebé, ofrecerle el chupete cuando la lactancia esté bien establecida para que no interfiera con ella.
- Comparta la habitación sin compartir la cama. Se recomienda que los bebés duerman en la misma habitación que los padres, pero en una superficie independiente, como un moisés o una cuna junto a la cama de los padres, hasta el año de edad o al menos durante 6 meses, cuando el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante es mayor.
- Además, asegúrese de que su bebé reciba todas las vacunas recomendadas. Algunos estudios demuestran que los bebés que reciben las vacunas tienen un riesgo menor de sufrir el síndrome de muerte súbita del lactante
Otras preocupaciones asociadas
Algunos padres podéis preocuparos por la plagiocefalia postural por el hecho de estar mucho tiempo boca arriba. En la plagiocefalia, los bebés desarrollan una zona plana en la parte posterior de la cabeza porque pasan demasiado tiempo acostados boca arriba (de espaldas). Pero esto se puede tratar fácilmente cambiando la posición del bebé en la cuna y permitiendo que pase más tiempo boca abajo supervisado mientras los bebés están despiertos.
También algunos padres podéis temer que si vuestro bebé duerme boca arriba éste pueda ahogarse con una regurgitación o un vómito. Los estudios indican que no existe mayor riesgo de ahogamiento en los bebés sanos o la mayoría de los bebés con reflujo gastroesofágico que duermen boca arriba. Si tu bebe presenta un intenso reflujo, puede ser de utilidad y se recomienda, elevar el colchón unos 30º en la cabecera. Solo en algunas excepciones, los médicos pueden recomendar que los bebés con algunos tipos de problemas inusuales en las vías respiratorias duerman boca abajo.
Y ante cualquier duda, consulta con tu pediatra
Comentarios recientes